«Oye Dios! Es hora de Despertar» - Isha

Tomado del Libro «Oye Dios! Es hora de Despertar»

Isha

 

En Esencia, la Vida es un Juego

 

En última instancia la vida es un juego, un juego de limitaciones. No tiene nada que ver con la verdad de quienes somos. No tenemos idea de la grandeza de quienes somos: creamos todo a cada momento y no hay nada más que eso.

 

Somos el creador y la creación, no hay separación, todos somos uno, siempre hemos sido uno y lo único que existe es el Amor. Voy a decir cosas que te pueden molestar, puedes no estar de acuerdo con ellas, pero en ningún momento te pediré que adoptes un nuevo sistema de creencias. Solamente estoy compartiendo mi experiencia, invitándote a leer este libro con una mente abierta y un corazón inocente. ¿Y si lo que yo digo es verdad? ¿Y si te dijera que tú eres Dios? ¿Que tú eres lo único que existe?

 

Tú has creado esta ilusión generalizada de limitación y tiempo. ¿Y si te dijera que lo único que ha existido siempre es lo que tú has experimentado? ¿Qué pensarías si te dijera que la tierra no tiene millones de años? Tú creaste esa ilusión para erigir el concepto de tiempo, y tú también creaste la evidencia científica para precisar y justificar tu ilusión. Esto incluye la historia así como los conceptos de vidas pasadas, bien y mal, correcto y equivocado, noche y día, bello y feo, luz y oscuridad, dolor y alegría, blanco y negro, homosexual y heterosexual, masculino y femenino, religión, países e idiomas, política, héroes y villanos, separación, separación, separación. Todo ha sido creado para convencerte de que existe la separación y la dualidad. ¡Tú has creado toda separación y dualidad, tú has creado todo!

 

 

Jugando el Juego

 

Podrías pensar que hay algo a lo que puedes regresar, pero la verdad es que nunca te has ido. No hay dónde ir, porque todo está dentro de tu conciencia. El reino del cielo que buscamos tan insistentemente está adentro.

 

Estás viviendo una perfecta experiencia humana, una experiencia de lo que no eres. El mundo es perfecto exactamente como es. Es una perfecta ilusión de limitación y dualidad. La decepción es perfecta y muy convincente. Es muy difícil jugarle un truco a Dios pero eso es lo que has decidido hacer: dejarte engañar por la ilusión para que puedas jugar el juego. Tú eres la fuente de todo Amor, no hay nada que desear, eres perfecto tal cual eres. Lo único que tienes que cambiar es tu percepción. ¿Esto te sorprende? ¿Te fastidia?

 

La gente me dice: «¿No ves el sufrimiento, las guerras, el terrorismo? ¿Acaso no ves la injusticia? Tú no entiendes». Y yo siempre contesto: «Todo está en tu cabeza, todo tiene que ver con tu percepción. Todo el mundo está creando exactamente lo que necesita en todo momento para jugar el juego y todo el mundo creará exactamente lo que necesite cuando quiera despertar; despertar a la verdad de quien eres: el Infinito, la Fuente de todo lo que es, Dios».

 

El mundo existe para que tú juegues el juego. Todos están jugando su rol para ti: están hambrientos por ti, están muriendo por ti, están rompiendo su corazón por ti, están sufriendo por ti, están yendo a la guerra por ti, están escribiendo poemas y conciertos para ti, están llorando por ti, están riendo por ti, y yo estoy escribiendo este libro para ti. Todos, todo, cada lugar, existe solamente para ti porque...  ¡TÚ ERES EL ÚNICO AQUÍ!

 

Fraternalmente en la luz del amor

Miccael Sais