El niño espiritual.
Una vez un niño sentía que los demás no le querían, pero cuando vio que los demás en el fondo de su corazón, guardaban la llave que abre la puerta al Amor y a la felicidad, se fue acercando a ellos y les habló con Amor viendo que los demás le respondían de la misma forma, y desde entonces, vio en ellos Amor y ese sentimiento de rechazo que sentía por sentir que no le querían, se desvaneció y se sintió Amado y lleno de Amor hacia todos los seres sin excepción.
No debemos hacer que nuestra felicidad dependa de los demás porque la felicidad y el Amor nos pertenecen, pero sí podemos hacer que la felicidad esté siempre con nosotros y no dependa de nadie más que de nuestro Ser interior que es Amor. Nuestro Ser es el Amor Universal y nuestro Ser somos nosotros, por tanto jamás podremos separarnos del Amor Eterno y Universal.
El Amor está y siempre estará en nosotros y con nosotros porque nosotros somos Amor. Si los demás no tienen Amor dentro de sí mismos, no quiere decir que no nos amen, simplemente que no han descubierto todavía la fuente inagotable de Amor Infinito que reside en ellos y que ellos son y si nosotros les damos Amor, les podremos ayudar a descubrirla y será precioso, tanto para ellos como para nosotros, es aquí donde reside la armonía y sincronismo de luz y Amor del Universo pues el Amor que en ellos está se sincronizan con el Amor que en nosotros habita y ese instante de Amor, Luz y Paz, es precioso y se prolonga hasta el infinito.
Un abrazo fraternal en la luz del amor
Miccael Sais
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